---------- Mensaje reenviado ----------
De: Blogger <no-reply@blogger.com>
Fecha: 21 de septiembre de 2017, 18:48
Asunto: [TacnaComunitaria] PERÚ: SEGUNDA OLA DE LA CORRUPCIÓN
Para: luismiguel1952@gmail.com
      
      
    
    
    
    
  
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Publicado por Blogger para TacnaComunitaria el 9/21/2017 06:48:00 p. m.
De: Blogger <no-reply@blogger.com>
Fecha: 21 de septiembre de 2017, 18:48
Asunto: [TacnaComunitaria] PERÚ: SEGUNDA OLA DE LA CORRUPCIÓN
Para: luismiguel1952@gmail.com
  Estimados amigos:
    Reiteramos la importancia de actuar integralmente  ante la segunda ola de la corrupción, que parece ser en montos más que la  primera ola de Fujimori/Montesinos/Hermoza Ríos; nuestro aporte está en  dirección a que el actual gobierno y el presidente de la república Pedro Pablo  Kuchinsky asuman la responsabilidad del cuánto que se han llevado las empresas  brasileras y sus aliadas peruanas.
    Es evidente que hay lenidad para intervenir, con  decisión y firmeza, sin violar las leyes a fin de que la segunda ola corruptora  tengan no sólo las sanciones por parte de los órganos de justicia de cómo  obraron, sino que se encuentren los montos arrebatados al fisco peruano, de  manera tal que dicha recuperación sea al detalle, incluyendo las reparaciones  civiles.
    El ejecutivo debe coordinar estas acciones con la  contraloría general para los efectos relacionados a la participación de los  interventores por designarse; asimismo, el trabajo terminado debe motivar que  se informe al congreso de la república, para que éste formule los dispositivos  que sean necesarios en el proceso de la recuperación de los millones de dólares  que indebidamente se apropiaron las empresas de la "geopolítica rapaz de los  brasileros" y de las empresas nacionales aliadas y cómplices de lo arrebatado  al tesoro público y a todos los peruanos.   
    Atentamente,
    Fernando Arce Meza
    El comportamiento del presidente Paniagua no ha  continuado en las siguientes administraciones de los gobiernos, las  consecuencias están a la vista; la eliminación de los juzgados y fiscalías  anticorrupción fueron despareciendo, y menos cabe pensar que los ex presidentes  Toledo, García y Humala no cumplieron con la prevención de los grandes hechos de  corrupción de estas dos últimas décadas y menos denunciar, amén de la  continuidad en el aflojamiento en su misión de la CG. 
    La segunda ola de la corrupción ha corrido a cargo del embate de  las empresas brasileras constructoras, aliadas con las nacionales y los  sobornados dirigentes de los gobiernos; ante este hecho el Perú como país no ha  encausado la recuperación del atentado perpetrado. El ejecutivo no se ha  organizado para la recuperación, nombrando a interventores en cada empresa  brasilera –caso Odebrecht que ha dicho que ha actuado en la corrupción y de las  otras empresas brasileras que han guardado silencio- para no obstaculizar la  marcha económica ya declinante. 
    Paradójicamente los ex presidentes aparecen  comprometidos en las faltas e irregularidades, son denunciados y otros son  investigados sobre las acciones de sobornos de parte de las empresas  constructoras brasileras y sus pares las constructoras nacionales que formaron  la segunda mafia. Esta  ha correspondido a los períodos de los gobiernos  donde las empresas extranjeras brasileras participaron en la construcción de  obras de mucha inversión y de la pomposa importancia que se les dio, en un  tiempo de casi treinta y seis (36) años que corresponde a ocho gobiernos. Sin  embargo, debe tenerse muy en cuenta que esta mafia tenía un objetivo distinto  de la primera mafia. 
    Los brasileros ganarían las licitaciones de todas  las obras para obtener mucho dinero, el poderío de las empresas les aseguraría  no solo su riqueza, sino cómo los brasileros tendrían primacía y poder en la  región sudamericana y en Latinoamérica partiendo de ostentar estrategias que  seguirían un orden geopolítico. Es probable que este actuar hace que las  empresas se vuelvan muy fuertes económica y financieramente, para ello se  enlazaron con los políticos en el poder del Brasil. Se formó una alianza no  solo con el gobierno de su país –alrededor de Petrobras- la empresa pública más  sobresaliente del Brasil; sino con el partido de gobierno que tenía una  secuencia de tres períodos en el poder.
    Estas alianzas políticas y financieras les abrirían  los espacios, a fin de alcanzar un ámbito de acción constructora imparable y de  aparente superioridad en la competencia internacional. La presencia de los  representantes de sus gobiernos como era el caso del partido de los  trabajadores, cumpliría también en hacer alianzas con gobiernos y partidos en  el Perú y con el resto de países de la región, tanto es así que el apoyo para  que ganen las elecciones los partidos amigos no solamente venían en adhesiones  y discursos, sino en apoyos económicos donde las empresas brasileras ponían las  cuotas de fondos, para ganar éstas, a través de  licitaciones y buenas pro  que les fueran concedidas.  
    Tuvieron estas empresas brasileras personal  especializado en enganchar a altos y medianos funcionarios peruanos que los  "ayudaban" en salir ganadores de las licitaciones convocadas para acceder a  construir las obras de infraestructura. Los políticos peruanos que intervenían  en esos acuerdos ilícitos ¿ignoraban del trabajo geopolítico iniciado hace  varias décadas de la elite brasilera –militar y después política- como para que  este país sea potencialmente el más fuerte de la región? Esto no puede pasar ni  menos olvidar de la arremetida brasilera eliminando competidores en todas las  formas y estilos para desarrollarse en un país como el Perú, y de cómo no  resulta creíble que los brasileros tenían ambiciones de llegar a ostentar  que solamente sus empresas eran las más poderosas de la región sudamericana.
    Esta organización empresarial extranjera tuvo como  acompañantes de construcción de obras públicas a las empresas nacionales de  significativa organización y de capital, además que trabajaron unidas por  muchos años. La habilidad delictiva de los brasileros como se ha dicho tuvo  características de modernidad no sólo para reclutar a funcionarios  "colaboradores", sino de cómo entregaron el dinero usando una serie de  mecanismos de transacción financieras hasta llegar a los depósitos cifrados. 
    Sobre lo dicho cabe decir que será imposible llegar  a conocer cuánto recibieron los que se pusieron en venta a las empresas  brasileras, a no ser que se consiga o se presenten personas que se conviertan  en colaboradores –peruanos y/o extranjeros- o que la empresa extrajera negocie  con las autoridades peruanas del ejecutivo (procuradores) y de la fiscalía de  la nación, partiendo de que, a través de esta negociación se pueda saber  quiénes han sido los comisionistas en todos los niveles y cuánto han recibido.  Algo que hasta el momento no se ha producido.
    Debe saberse que la segunda mafia ha calificado a  cada colaborador de acuerdo a la información proporcionada sobre la categoría  del cargo y de la falta de ética y moral de lo qué cuesta cada sobornado, esto  ¿responde o forma parte del acervo geopolítico brasilero? Estas ilícitas  operaciones de la mafia han sido en un tiempo largo, pasando por varios  gobiernos, en consecuencia el gobierno peruano encabezado por el actual  presidente de la república, Pedro Pablo Kuczynski –como lo hizo Paniagua en  momentos semejantes- tiene que dirigir personalmente el tamaño trabajo que  permita obtener un inventario por cada empresa y por cada obra ejecutada bajo  la dirección de un ministerio y/o un organismo público. 
    Urge la necesidad de que el poder ejecutivo  usando las vías judiciales correspondientes nombre interventores en cada una de  las empresas brasileras, a fin de que las obras que están pendientes  continúen, no paralizando ni abandonando las mismas, ello afectaría la  continuidad de la inversión, lo que ha afectado y podría afectar más a la  economía nacional.
    Esta debió ser como primera acción a fin de llegar  a recuperar lo apropiado ilícitamente y de los balances finales antes de actuar  en expulsarlos, se tiene que  verificar los montos de las probables  reparaciones civiles, ante la apropiación ilícita de estas empresas  constructoras. Asimismo se deben dictar los dispositivos que reglamente lo  mencionado en los puntos anteriores, a fin de dar fluidez en el manejo de las  empresas intervenidas. 
    Estos dispositivos se tienen que dictar en el marco  de la participación de los interventores judiciales; por ejemplo el DS de  Urgencia Nº 003 se debió dictar después del ingreso de los interventores y no  necesariamente todos los artículos de éste decreto serán considerados, si no los  que tomen en cuenta la presencia interventora, los otros dispositivos que  igualmente sean dictados en la medida de las acciones realizadas por los  interventores y de los que éstos sugieran. 
    En consecuencia, es pertinente reconocer que la  recuperación de lo arrebatado no solo requiere la intervención de la fiscalía y  de los jueces de las cortes judiciales para apresar a los corruptos y sus  empresas y la de sus aliados; sino esta lucha de fiscales y jueces, se necesita  en favor del país; la  recuperación es cuestión del ejecutivo quien debe dirigir tamaña tarea, para  ello tiene que poner objetivos, fines y una organización que asuma las medidas  conducentes a dicha recuperación, porque como ya se ha dicho la segunda  mafia es distinta a la primera de los años 90; pero ambas son responsables de  haberse sustraído al país, a su Estado por lo menos dos puntos del producto  bruto interno (PBI).
    El resultado del trabajo del poder ejecutivo, la  parte más importante es saber el costo de cada proyecto con los adicionales y  de las otras partes que se incluyeron y que todo o parte fue pagado  indebidamente. Esto último debe comparase con lo que realmente costó el  proyecto, usando los índices internacionales, la diferencia sería lo sustraído  (robado) por las empresas brasileras al Estado peruano. Esto debe motivar los  petitorios judiciales de recuperación por la conducta y procedimientos ilícitos  de dichas empresas.
    Será pertinente licitar internacionalmente para que  una empresa se encargue de establecer los montos de devolución y multas de  apropiación ilícita que las empresas brasileras hicieron al llevarse las altas  ganancias producto de mayores costos. Estas ganancias indebidas deben ser  motivo de protocolos en que se señale lo que se tiene que recuperar de manera  ejemplar, pero, legal.
    Cabe también que el poder ejecutivo sepa otros  hechos inherentes a estos robos mostrados en las millonarias coinmisiones, en  cuanto a conocer los contactos y las formas de negociar individual o en grupo,  siguiendo al detalle la secuencia de cada hecho, motivando esclarecer el  panorama sombrío del Estado peruano de este último cuarto de siglo, vinculando  a la recuperación de lo arrebatado al Perú.
    El actuar del poder ejecutivo sería por demás  importante e imprescindible para que el Perú y la ciudadanía esté no sólo  enterada de lo ocurrió; sino lo que corresponde hacer con los "comisionistas" y  sus colaboradores, quienes deben ser acusados ante el poder judicial, además de  la aplicación de pronunciamientos cívicos, destinados a que no se vuelvan a  producir hechos indignos en la vida de un país democrático con historia  milenaria, lo que nunca jamás deberá tener eco en el tiempo.
    Autor: Fernando  Arce  Meza
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Publicado por Blogger para TacnaComunitaria el 9/21/2017 06:48:00 p. m.

 
 
 
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